Es una planta ornamental y es utilizada frecuentemente como planta de interior debido a su tolerancia a la sombra, dándose su mayor esplendor en sitios bien iluminados pero no expuestos directamente al sol y lejos de corrientes de aire.
Un exceso de luz provoca que las hojas se vuelvan amarillas y se sequen las puntas.
Puede alcanzar entre 60 a 200 cm, dependiendo de la especie, con tallo erguido, hojas ovaladas o lanceoladas, discretamente asimétricas, de color verde oscuro alternadas con figuras irregulares de colores más claros.
Toxicidad
Las células de la planta del Dieffenbachia contienen cristales aciculares de oxalato del calcio llamados rafidios. Si se mastica una hoja, estos cristales pueden causar una leve sensación de ardor y un eritema temporales. Se cree que otras enzimas de la planta acrecientan la potencia de los cristales.
Clínica (generalmente en niños y mascotas)
Ingesta:
- Irritación de la garganta
- Babeo
- Inflamación de mucosa oro-faríngea
Contacto:
- Irritación e inflamación del área de contacto
La ingesta o contacto con esta planta raramente comprometen la vida de la persona o mascota, dependiendo la clínica o gravedad de la intoxicación de cada paciente en particular.
En la mayoría de los casos, los síntomas son moderados, y pueden tratarse analgésicos, antiinflamatorios y antialérgicos (esteroides y antihistamínicos) y carbón mineral activado.
En el curso de Emponzoñamiento Animal se hará una descripción del manejo de las reacciones alérgicas por animales y plantas.
Prevención
-En hogares donde hay mascotas que tienen hábitos de masticar plantas se sugiere no tener esta planta, igualmente donde hay niños menores de 4 años no tenerla en la casa, es importante hacerle ver a los niños mayores y adultos que esta planta es venenosa.
IMPORTANTE:
A pesar de que la mayoría de las intoxicaciones por esta familia de plantas se presentan como cuadros clínicos leves o moderados, ellas pueden ser mortales si la cantidad ingerida es importante o si el contacto con ella es muy prolongado.
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