Los altos niveles de colesterol malo en la sangre puede causar muchos problemas de salud, los más comunes y graves son los relacionados al aumento del riesgo de sufrir enfermedades cardíacas y un accidente cerebrovascular.
El exceso de colesterol total en la sangre provoca el endurecimiento de las arterias, por lo tanto tenemos que tener mucho cuidado de que no se aumenten dichos niveles. Asimismo es importante saber que en la naturaleza existen variedades de plantas y productos que nos pueden ayudar a controlar los niveles de colesterol y de triglicéridos.
Remedio casero con Guggul
El Guggul es una planta medicinal originaria de la India, allí se ha utilizado tradicionalmente durante siglos para bajar los niveles de colesterol en sangre y de triglicéridos, ayudando a mejorar notablemente la relación entre el colesterol malo y el bueno. De igual manera algunos investigadores aseguran que el guggul tiene la capacidad de reducir la producción a nivel hepática de los triglicéridos.
Remedio casero con avena
La avena es un cereal con grandes propiedades para el organismo ya que ayuda a los pacientes enfermos de colesterol y de triglicéridos a mantenerlos controlados. Su gran efecto se debe a la gran cantidad de fibra soluble que contiene, según las afirmaciones de los expertos en la alimentación, este alimento contiene betaglucanos o polisacáridos los cuales poseen valiosas propiedades anti-cancérigenas naturales, por esta razón es considerada uno de los alimentos mas importantes que se puede recomendar como remedio natural y efectivo para tratar una gran cantidad de enfermedades.
Remedios caseros con fenogreco
La alholva/fenogreco es una hierba medicinal que se origino en el sur de Europa y Asia, fue utilizada desde hace siglos como un remedio natural y efectivo para reducir y controlar los niveles altos de triglicéridos, siendo utilizadas las semillas secas de esta planta para reducir la absorción de triglicéridos en el intestino.
De igual manera, la mejor forma de controlar estos niveles de colesterol y triglicéridos es manteniendo una alimentación baja en grasas y teniendo actividad física todos los días; además se debe consumir una buena cantidad de frutas y de verduras, como también de agua, pero lo más importante es evitar las comidas grasosas, como las frituras y las salsas, así como también las llamadas «comidas rápidas», las cuales contienen grasas saturadas que contribuyen a aumentar los niveles de colesterol y el peso de manera incontrolable.
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